Cómo motivar a los menores a usar cubrebocas
5 consejos para acostumbrar a los menores a usar cubrebocas
Escoger un estampado o tela con dibujos anima a los menores a utilizar el cubrebocas.
Los padres son un referente para sus hijos por lo que deben utilizar el cubrebocas de forma adecuada y segura.
Está comprobado que el uso de cubrebocas ayuda a frenar la transmisión del coronavirus, por ende, muchos países han hecho obligatorio su uso para la población en general.
Para algunos tomó menos tiempo hacer el uso de cubrebocas una costumbre, pero para aquellos que su uso resulta una molestia, ha sido una constante lucha poder crear el hábito.
Particularmente los niños y niñas más jóvenes son esa parte de la población a quienes les resulta confusa la situación que se vive actualmente y el por qué se deben utilizar mascarillas en lugares públicos cerrados o antes de salir de casa.
En apoyo a las familias, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF, por sus siglas en inglés), puso a disposición consejos para acostumbrar a los pequeños a utilizar mascarilla.
Para acostumbrar a los menores al uso de cubrebocas se recomienda:
Ser sincero
Hay que reconocer que el cubrebocas no es agradable para nadie, pero que al utilizarlo se pueden proteger a seres queridos y personas que se encuentran al alrededor. Los niños y niñas deberán entender aquello como una forma de demostrar que se preocupan por los demás.
Mostrar empatía
Ante esta situación es importante que los padres se interesen, aún más, por los pensamientos y sentimientos de sus hijos. La UNICEF recomienda a los líderes de la familia acercarse a los pequeños y hacer preguntas sobre su estado de ánimo y dudas que puedan tener sobre lo que acontece en la actualidad.
Empezar desde casa
La práctica de llevar el cubrebocas es un hábito que se crea de poco en poco. Se puede empezar por utilizarlo incluso en casa, practicando las formas de ponerlo, llevarlo y quitarlo.
Animar a los hijos
Los expertos consultados por la UNICEF aconsejan elegir una mascarilla o un tejido con dibujos de sus personajes favoritos o figuras que hagan más divertido llevar la mascarilla puesta. Entre más le guste el aspecto de la mascarilla, mayores probabilidades habrá de que se la ponga.
Dar ejemplo
Cuando a los menores se les habla sobre una obligación hay que dar el ejemplo. Los adultos deben ser conscientes de que son una referencia para los más jóvenes, por ello, se debe utilizar la mascarilla de forma adecuada y segura.
Ponerse la mascarilla
Primero que todo, lávate las manos con agua y jabón antes de ponerte la mascarilla.
Asegúrate de que la mascarilla está limpia. Comprueba que no tiene rasgaduras ni agujeros. No te la pongas si está sucia o presenta algún desperfecto.
Ajústate la mascarilla de manera que te cubra correctamente la boca, la nariz y la barbilla y no queden huecos a los lados.
Asegúrate de que puedes respirar cómodamente.
Mientras llevas puesta la mascarilla
Cámbiate la mascarilla si se ensucia o se humedece.
No coloques la mascarilla bajo la nariz o la barbilla ni la lleves en la cabeza: para que sea eficaz, debe cubrir en todo momento la nariz y la boca.
No toques la mascarilla mientras la llevas puesta.
Consejo: si tú y tu familia piensan quitarse las mascarillas y volver a utilizarlas a lo largo del día, lleven consigo bolsas limpias que puedan cerrarse herméticamente para guardarlas. Utilicen una bolsa para cada mascarilla. Al meter o sacar la mascarilla de la bolsa, agárrenla por las tiras elásticas o los cordones (sin tocar la superficie de la mascarilla) a fin de evitar una posible contaminación. No olviden lavarse las manos antes de ponérsela.
Quitarse la mascarilla
Lávate las manos antes de quitarte la mascarilla.
Para quitarte la mascarilla, retírala utilizando las tiras elásticas o los cordones. Evita tocar la parte frontal de la mascarilla.
Lávate las manos después de quitarte la mascarilla.
Las mascarillas de tela deberían lavarse después de cada uso y guardarse en una bolsa limpia.
Las mascarillas médicas son de un solo uso y deben desecharse en una basura cerrada.
El Horizonte Emily Torres foto agencias UNICEF