Cerca de Valladolid y Ek Balam tendrás para escoger entre varios cenotes
¿Qué hay para ver en Ek Balam ?
Las principales edificaciones de Ek Balam se encuentran situadas en dos plazas o explanadas, llamadas Plaza Norte y Plaza Sur, dentro de un área amurallada en la que hay otras estructuras alrededor de las plazas.
La Plaza Norte es la más grande y de mayor antigüedad del yacimiento arqueológico y está formada por las construcciones 1, 2 y 3.
La edificación más importante es la 1, llamada La Acrópolis, que es la más extensa y alta del sitio arqueológico. Las otras dos construcciones de la Plaza Norte, las N° 2 y 3, se encuentran en proceso de excavación.
Las demás edificaciones de Ek Balam están emplazadas en la Plaza Sur, sobresaliendo Las Gemelas, El Palacio Oval, la Plataforma de las Estelas y el Juego de Pelota.
La Acrópolis
Este gran monumento, para el que se adoptó el nombre reservado en la antigüedad clásica, particularmente la griega, para designar al lugar más alto de las polis o ciudades, era el Palacio Real de Ek Balam y tiene una altura de 31 metros y una extensión de 160 metros de largo por 60 de ancho.
La Acrópolis es el mayor volumen arquitectónico de Ek Balam, al que añade una enorme complejidad constructiva, dado el largo periodo empleado en su conformación.
En las distintas etapas de construcción de La Acrópolis se fueron superponiendo estructuras, con una gran cantidad de aposentos abovedados, distribuidos en diferentes niveles, los cuales se comunican por medio de una intrincada red de pasadizos y escalinatas.
Los más importantes descubrimientos sobre la historia política y artística de la ciudad prehispánica de Ek Balam provienen de La Acrópolis.
En esta inmensa construcción fueron hallados unos monumentos de piedra conocidos como las Serpientes Jeroglíficas, con varias inscripciones, entre las que está representado el glifo emblemático de Ek Balam.
Los glifos eran signos grabados o pintados por los mayas y estaban principalmente asociados a las interpretaciones que hacían de los astros del firmamento y sus movimientos, y los glifos emblema revestían la máxima relevancia.
En los monumentos pétreos de La Acrópolis se menciona el nombre del gobernante o ahaw maya, Ukit Kan Lek Tok, el personaje de mayor relevancia identificado hasta la fecha en Ek Balam.
Ukit Kan Lek Tok, cuyo nombre significa “Padre de las Cuatro Calabazas de Pedernal” fue un gobernante maya que reinó en Ek Balam entre los años 770 y 801 d.d.C., durante el Periodo Clásico.
Es considerado el fundador de la dinastía del reino Talol, cuya capital se cree que era Ek Balam, por lo que su importancia histórica es equiparada a la de Xook Yax Ehb, en Tikal, y a la de Yax Kík Mo, en Copán.
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Durante el mandato de Ukit Kan Lek Tok, la ciudad de Ek Balam alcanzó su máximo apogeo y a partir de los restos físicos y representaciones del mandatario, los antropólogos físicos del Instituto Nacional de Antropología e Historia, han establecido que tenía la mandíbula desviada, el labio superior partido e incluso 23 piezas dentales cariadas.
Los restos físicos de Ukit Kan Lek Tok fueron hallados en el cuarto nivel de La Acrópolis, en un recinto llamado Sak Xok Naah, que significa “Casa Blanca de la Lectura” en lengua maya.
En el monumento funerario, los restos de Ukit Kan Lek Tok fueron rodeados por una espléndida ofrenda, compuesta por más de 7 mil piezas de jade, concha, hueso y pirita, además de un pendiente de oro en forma de rana y tres perlas.
El talento de los artistas mayas que decoraron La Acrópolis ha quedado en evidencia en varios aposentos del conjunto, a pesar de que la mayor parte se ha perdido por el deterioro y desaparición del estuco original. Esta originalidad artística es palpable tanto en las figuras talladas como en las pintadas.
Entre estas magníficas muestras del arte de los mayas de Ek Balam se encuentra el friso del Cuarto 35, que tiene unas espléndidas imágenes antropomorfas, así como llamativos elementos ornamentales zoomorfos y geométricos.
La escalera central que conduce a la cima de La Acrópolis de Ek Balam fue mandada a construir por Ukit Kan Lek Tok. Es una escalera ritual que tiene la particularidad de que sus peldaños son de distintos tamaños, con unos más anchos que otros.
Algunos especialistas han especulado que los escalones más anchos eran para detenerse a orar o a realizar algún tipo de ceremonia meditativa mientras se ascendía a la cúspide.
En todo caso, el público aún puede ascender por esta escalera, a condición de tener cuidado con las particularidades de los escalones, a objeto de no trastabillar y aventarse.
Decimos que aún se puede subir, porque en la Pirámide de Kukulkán, principal monumento de Chichén Itzá, ya no están permitidos los ascensos, por los daños que ha sufrido el templo con las subidas y bajadas. Así que apresúrate a subir La Acrópolis de Ek Balam antes de que sea tarde.
Las ciudades más cercanas a Ek Balam
La ciudad más cercana a Ek Balam es Valladolid, localidad situada a casi 1.500 km de la Ciudad de México, pero a solo 30 km de Ek Balam. Valladolid es una ciudad de casi 50 mil habitantes, cabecera del municipio del mismo nombre.
Valladolid cuenta con todos los servicios turísticos, tanto por la cercanía de Chichén Itzá (que se encuentra a 50 km) y Ek Balam, como por sus propios atractivos de bella ciudad colonial.
Otras ciudades cercanas a Ek Balam son Playa del Carmen, Quintana Roo, que está a 156 km y Mérida, la capital yucateca, que se localiza a 175 km. Cancún se encuentra a 172 km de Ek Balam.
El clima en Ek Balam
Con una altitud de apenas 22 metros sobre el nivel del mar, el clima de Ek Balam es cálido, con una temperatura promedio anual de 25,4° C.
El periodo más caluroso del año transcurre entre abril y octubre, cuando el termómetro se mueve en promedio entre 26 y 29° C. En noviembre empieza a refrescar levemente y en diciembre y enero te estarás “helando” con 22° C.
En el periodo de calor, la temperatura puede alcanzar extremos próximos a los 35° C, mientras que las temperaturas mínimas invernales se sitúan en torno a los 16° C. En Ek Balam llueven 1.129 mm al año, la mayor parte durante una temporada bien definida, entre mayo y octubre.
El yacimiento está abierto al público los 7 días de la semana en horario entre las 8 de la mañana y las 5 de la tarde.
Para entrar a Ek Balam hay que pagar dos tickets, uno de 65 MXN que cobra el Instituto Nacional de Antropología e Historia y otro cobrado por el Gobierno del Estado de Yucatán a través de su Agencia de Administración Fiscal. Esta última admisión es de 69 MXN para personas de nacionalidad mexicana y de 132 MXN para extranjeros.
Los nacionales mexicanos y los extranjeros residentes en el país tienen acceso gratuito los días domingo.
Cerca de Valladolid y Ek Balam tendrás para escoger entre varios cenotes, todos de singular belleza, entre los que sobresalen Zací, Oxmán, Suytún, Xkeken y Samulá.
El Zací es de preciosas aguas azul turquesa y el acceso al cenote a cielo abierto es por una gruta de cuyo techo penden formaciones rocosas de formas caprichosas. La vegetación del lugar es exótica y exuberante.
El Oxmán es otro cenote a cielo abierto de increíble belleza, en cuyo espejo de agua el sol se refleja de manera maravillosa.
Las aguas son nítidas y refrescantes, constituyendo una caricia para el cuerpo después de un día de sudores entre pirámides y monumentos prehispánicos. Cuenta con un pequeño mirador para tomar espectaculares fotos.
El principal atractivo del Cenote Suytún es el gran cuerpo rocoso que apunta desde arriba hacia el centro del espejo de agua, flanqueado por otras estalactitas menores.
El Seytún fue un cenote ceremonial para los mayas y por sus aguas cristalinas y poco profundas circula una gran cantidad de pececillos. Cerca del cenote hay cabañas y un pequeño pero interesante museo que exhibe piezas arqueológicas.
Las bonitas aguas turquesas del Cenote Xkeken son poco profundas, siendo ideales para nadar, y el ambiente paradisíaco es complementado con las estalactitas que se desprenden del techo de la caverna.
El acceso al cuerpo de agua es a través de un agujero entre las formaciones rocosas de la cúpula, constituyendo toda una aventura.
El Cenote Samulá es otra formación kárstica de incomparable belleza al que se accede a través de una escalera, desde cuyos peldaños se tienen magníficas vistas panorámicas.
La escalera llega hasta cerca del nivel de las aguas, que invitan a darse un refrescante chapuzón y a dejar que fluya del cuerpo todo el cansancio acumulado en la activa jornada de visitas a sitios arqueológicos.
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