La extorsión tema pendiente

La extorsión tema pendiente

Aquí entre nos, Por Javier López Velarde Luna

Jueves 28 de noviembre del 2024

Uno de los temas de seguridad -entre muchos- que quedaron pendientes con la gestión de Andrés Manuel López Obrador y que él mismo reconoció antes de dejar el poder, fue la extorsión en el país, un tema verdaderamente alarmante ya que los grupos organizados del crimen en México han utilizado este recurso delictivo como una poderosa forma de lucro infame que obviamente repercute en la seguridad de cada uno de los mexicanos.

Cabe destacar que explicado con manzanas que es lo que significa este delito se puede simplificar en que la extorsión se realiza cuando  una persona usa amenazas o coerción para obtener dinero, bienes o servicios de otra persona a cambio de evitarle daño o perjuicio.

En este sentido, la simple acción ilegal que se considera un delito en muchos sistemas legales, como el de México. En este tipo de delito, los delincuentes utilizan violencia psicológica para intimidar a las víctimas, como agresiones verbales. También hay ocasiones en que pueden aprovechar la confianza de las personas para engañarlas y obtener un beneficio.

Al hacer un desglose de los tipos de extorsión que se realizan en México podemos detallar la Extorsión directa que suele ser una modalidad donde el delincuente se presenta físicamente en el domicilio, trabajo o cualquier establecimiento donde se encuentre la víctima y se identifica como miembro de una organización delictiva, con el objetivo de exigir un pago para dar seguridad o evitar causar algún daño.

También puede suceder que los delincuentes lleven a cabo diversas acciones, como dañar la propiedad o enviar paquetes con mensajes que generen miedo en la víctima. Otra modalidad es la Extorsión indirecta que se realiza a través de llamadas telefónicas, mensajes de texto, correo electrónico o cualquier medio que permita realizar el delito a distancia.

Para ejemplificar esta modalidad de extorsión podemos mencionar cuando se finge el secuestro de un familiar, el engaño de algún familiar en el extranjero que tiene problemas, amenazas de muerte o secuestro, fingir ser alguna autoridad, amenazar con publicar en internet imágenes o información personal, entre otros.

 El que una extorsión se realice de forma indirecta no evita que este delito pueda recibir una pena. No obstante, y según la describe Wilkipedia, la extorsión a veces se denomina «chantaje de protección» porque los extorsionadores a menudo formulan sus demandas como el pago de «protección» frente a amenazas (reales o hipotéticas) de otras partes no especificadas; aunque a menudo, y casi siempre, dicha «protección» es simplemente la abstención de daño por parte de la misma parte, y así está implícito en la oferta de «protección». La extorsión es una práctica habitual del crimen organizado.

En algunas jurisdicciones, la obtención real del beneficio no es necesaria para cometer el delito, y hacer una amenaza de violencia que se refiere a la exigencia de un pago de dinero o bienes para detener la violencia futura es suficiente para cometer el delito. 2 La exacción se refiere no sólo a la extorsión o a la exigencia y obtención de algo por la fuerza,3 pero además, en su definición formal, significa la imposición de algo como dolor y sufrimiento o hacer que alguien soporte algo desagradable.

El término extorsión se utiliza a veces metafóricamente para referirse a la usura o a un aumento injustificado de precios, aunque ninguna de ellas se considera legalmente extorsión.

También se utiliza a menudo para referirse a situaciones cotidianas en las que una persona se siente en deuda contra su voluntad con otra para recibir un servicio esencial o evitar consecuencias legales.

Ni la extorsión ni el chantaje requieren la amenaza de un acto delictivo, como la violencia, sino simplemente una amenaza utilizada para obtener acciones, dinero o bienes del objeto de la extorsión.

Tales amenazas incluyen la presentación de informes (verdaderos o no) de comportamiento criminal a la policía, la revelación de hechos perjudiciales (como fotos del objeto de la extorsión en una posición comprometedora).

La extorsión se remonta a inicios de las culturas más representativas de la humanidad y cabe destacar que este delito ha sido usado por grupos de delincuentes que incluso fue el modus operandi principal de la mafia siciliana que se extendió en Estados Unidos al principio del siglo pasado, como es el cobro por la seguridad a establecimientos comerciales y que ahora es una forma muy utilizada en nuestro país.

En México y la mayoría de los países de América Latina, cuando hablamos de extorsión, nos referimos principalmente a tres modalidades:

El engaño telefónico. Puede suceder cuando se recibe una llamada que informa que somos acreedores a un premio y se condiciona su entrega a cambio de alguna cantidad de dinero o tarjetas prepagadas de algún servicio.

La amenaza telefónica. Sucede cuando se recibe una llamada de alguien que intenta atemorizarnos para que paguemos cierta cantidad de dinero.

En estos casos, el delincuente amenaza y exige que se pague una cantidad de dinero a cambio de no atentar contra nuestros familiares o nuestra persona.

Cobro por derecho de piso. Ocurre cuando los delincuentes se presentan directamente en el establecimiento, empresa u hogar para exigir cantidades periódicas y así garantizar la integridad física de la víctima o de su actividad comercial.

 Estos fenómenos delictivos vulneran la percepción de seguridad social y bienestar de las personas e inhiben la inversión formal, principalmente de pequeños y medianos empresarios. Asimismo, dichas conductas ilícitas afectan o ponen en riesgo el desarrollo económico regional y nacional.

Aunque también la extorsión puede referirse a la corrupción política, como el vender el cargo o el tráfico de influencias, pero en el vocabulario general la palabra suele evocar primero el chantaje o los chantajes de protección.

La conexión lógica entre el sentido de corrupción de la palabra y los otros sentidos es que exigir sobornos en la capacidad oficial de uno es chantaje o chantaje en esencia (es decir, «usted necesita acceso a este recurso, el gobierno restringe el acceso a través de mi oficina, y le cobraré injusta e ilegalmente por dicho acceso»). La extorsión también se conoce como shakedown, y ocasionalmente exacción.

En México, la extorsión al ser un delito, las penas correspondientes a nivel nacional se encuentran en el Código Penal Federal de México. Es el artículo 390 el que dice que quien, sin tener derecho, obligue a otra persona a realizar, omitir o tolerar algo, obteniendo un beneficio económico para sí mismo o para otros, o causando un perjuicio económico a alguien, se le aplicarán penas de y dos a ocho años de prisión multas de cuarenta a ciento sesenta días.

 Como en muchos delitos, la gravedad de este aumentará la pena recibida. Al que sin derecho obligue a otro a dar, hacer, dejar de hacer o tolerar algo, obteniendo un lucro para sí o para otro o causando a alguien un perjuicio patrimonial, se le aplicarán de dos a ocho años de prisión y de cuarenta a ciento sesenta días multa.

Las penas se aumentarán hasta un tanto más si el constreñimiento se realiza por una asociación delictuosa, o por servidor público o ex-servidor público, o por miembro o ex-miembro de alguna corporación policial o de las Fuerzas Armadas Mexicanas.

En este caso, se impondrá además al servidor o ex-servidor público y al miembro o ex-miembro de alguna corporación policial, la destitución del empleo, cargo o comisión y la inhabilitación de uno a cinco años para desempeñar cargo o comisión público, y si se tratare de un miembro de las Fuerzas Armadas Mexicanas en situación de retiro, de reserva o en activo, la baja definitiva de la Fuerza Armada a que pertenezca y se le inhabilitó de uno a cinco años para desempeñar cargos o comisión públicos.

Pero según el  Artículo 390 del Código Penal estas penas se incrementarán en cierta medida si el delito es llevado a cabo por una asociación delictiva, un funcionario o exfuncionario público, o por un miembro o ex miembro de una institución policial o de las Fuerzas Armadas Mexicanas y además de las penas mencionadas, se impondrá la destitución del cargo o empleo al funcionario o exfuncionario público, así como al miembro o ex miembro de una institución policial.

Del mismo modo, se les inhabilitará para desempeñar cargos o comisiones públicas durante un período de uno a cinco años. No obstante, en la Conferencia Mañanera con la presidenta Claudia Sheinbaum se destacó que este delito que por cierto, se ha incrementado en el país con las extorsiones presenciales  donde la Secretaría de la Defensa Nacional por ejemplo en Michoacán con los productores de limón, se han detenido a cerca de 70 sujetos en  lo que va de esta administración.

Los operativos se replican en varias partes del país sin embargo, aún falta mucho por hacer, con el factor de que en las extorsiones telefónicas las personas afectadas por temor no denuncian…

Pero como siempre la mejor opinión es la de Usted Querido Lector.

La extorsión

 

 

Aquí entre nos, Por Javier López Velarde Luna

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