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¿Qué hace a los móviles gaming una gran alternativa para jugar?

 

¿Qué hace a los móviles gaming una gran alternativa para jugar?

La evolución de los videojuegos los han sacado del interior de los hogares. Si antes para poder jugar, las consolas y los ordenadores potentísimos eran fundamentales, los avances tecnológicos nos han dado lugar a una alternativa perfecta: los teléfonos móviles. Pero. ¿qué hace que los actuales smartphones sean tan buenos para jugar? Y sobre todo, ¿qué tienen los móviles gaming para ofrecer una experiencia de juego de alta calidad?

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Rendimiento superior

Es una obviedad, pero hay que tenerla bastante en cuenta. Uno de los pilares fundamentales de los móviles gaming, al igual que en el caso de los ordenadores, es su alto rendimiento con respecto a dispositivos de menor rango. Un juego de alta calidad gráfica no puede disfrutarse si el dispositivo en cuestión no puede ejecutarlo en condiciones, lo que afecta claramente a la experiencia.

Uno de los pilares fundamentales de un buen teléfono gaming está en el procesador de gama alta. Los procesadores más avanzados no solo manejan juegos pesados con facilidad, sino que también permiten una multitarea fluida y tiempos de carga bastante rápidos. En los últimos años, han surgido dos marcas de procesadores que se han situado por encima de todos: Snapdragon y Mediatek.

La memoria RAM es otro de los aspectos que no puedes descuidar en un móvil dedicado para jugar. Hace unos años, 6GB de RAM era lo recomendable, pero en los últimos tiempos ha empezado a ser insuficiente. Hoy día, los 8GB se consideran el mínimo, mientras que se empieza a mirar más a los 12GB como el estándar a tener en cuenta en la industria.

El almacenamiento es fundamental en un móvil, pero además, un almacenamiento rápido es importantísimo en un teléfono móvil gaming. Un disco duro interno UFS 3.0 o superior asegura que las aplicaciones se carguen rápidamente y que haya suficiente espacio para tener varios títulos instalados.

Experiencia inmersiva

El rendimiento por sí solo no es suficiente. La experiencia de juego también depende de cómo el jugador se siente inmerso en el juego.

Uno de los factores que más aportan a una buena experiencia de juego es una pantalla de alta calidad. Primero, una pantalla grande podrá permitirte tener mayor espacio de visión, algo que puede ser fundamental para entender qué está ocurriendo en todo momento en una partida de tragamonedas online. Además, una pantalla con una tasa de refresco elevada (al menos 90Hz) hace que el juego se vea más fluido, además de garantizar movimientos suaves y una respuesta táctil rápida.

Un sonido envolvente es clave en cualquier juego. Los desarrolladores invierten enormemente en tener un buen sonido, pero si el teléfono no tiene un sistema de sonido a la altura, no sirve de absolutamente nada.

Otro aspecto fundamental en cualquier teléfono móvil es una batería de alta capacidad, pero más aún en un teléfono gaming. Los videojuegos tienen un consumo de batería bastante alto, por lo que necesitas muchas horas de pantallas disponibles para poder jugar tanto tiempo como consideres oportuno. Además, una batería de carga rápida favorece que, una vez se haya descargado, puedas disponer de toda tu energía lo antes posible.

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