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Preocupante ritmo de contagios y muertes en Brasil

 

El ritmo de contagios y muertes en Brasil pone en riesgo a toda América Latina

Mientras gran parte del mundo avanza con sus planes de vacunación para estabilizar la propagación del coronavirus, desde hace más de una semana Brasil se ha vuelto a convertir en el epicentro de la pandemia a nivel global. Con un ritmo de contagios y muertes alarmante, una estrategia de inoculación que no avanza, hallazgos de nuevas mutaciones del covid-19, y un sistema sanitario al borde del colapso, el gigante sudamericano se convirtió en un verdadero riesgo para la región, y pone en alerta al resto del mundo.

La aparición de una nueva cepa más infecciosa y los altos índices de casos y decesos diarios registrados en la última semana alarman a las autoridades regionales. Las medidas tomadas por los países vecinos, mientras el gigante sudamericano está al borde del colapso.

“La situación es profundamente preocupante y las medidas que se deben tomar deben ser lo más serias posibles para lograr un progreso significativo”

Advirtió el viernes pasado Tedros Adhanom Gebreyesus, director de la Organización Mundial de la Salud.

“La situación en Brasil ha empeorado, con una incidencia muy alta de casos y un aumento de los incidentes de muerte en todo el país”, añadió Michael Ryan, director de emergencias del organismo internacional, quien además reconoció la preocupación que existe a nivel internacional “respecto al aumento de la transmisibilidad y letalidad” de la cepa brasileña que, según datos preliminares de algunos estudios obtenidos por la ONU, puede ser hasta dos veces más contagiosa que la variante original del coronavirus.

Ryan alertó la “amenaza extrema” en la que se encuentra el país sudamericano, que días atrás llegó a registrar más de 2.000 muertos por coronavirus en 24 horas, y actualmente cuenta con más del 96% de las camas de cuidados intensivos ocupadas en las regiones del centro y sur del territorio nacional.

Pese a las recomendaciones de los organismos internacionales, el presidente Jair Bolsonaro, quien contrajo coronavirus el años pasado, ha relativizado el impacto del virus desde el inicio de la pandemia. Además, de haber cuestionado la eficacia de las vacunas, también es un férreo crítico de las medidas de aislamiento social, por sus efectos económicos, así como el uso de mascarillas.

Su gestión frente al covid-19 le valió multitudinarias protestas en su contra, e incluso denuncias ante organismos internacionales por el número de contagios, como la que realizó la Conferencia Episcopal de Brasil ante la ONU y la OMS a fines de enero. Los obispos brasileños denuncian una “conducta política, económica y social contradictoria, negacionista, indiferente al dolor” que “está amplificando las profundas desigualdades”.

Países como Uruguay, Paraguay, Argentina, Perú y Colombia, han encendido las alertas ante lo que está ocurriendo en Brasil, país con el que limitan.

Con información de Infobae foto REUTERS Ueslei Marcelino